Unos rollos con mucha personalidad

“La mahoma de Biar mentja rollets i fogasses se la emporten a Villena y la unflen a remolaches”.

En el número 60 de la calle Mayor de Biar se colocan los rollos en ambas puntas de la luna del turbante de la Mahoma. Cada 11 de mayo, la Mahoma cierra el Ball dels Espies, uno de los actos más auténticos y singulares de los Moros y Cristianos de Biar. El trayecto que separa la plaza del Raval, punto de inicio de Ball dels Espies hasta la de la Constitución, donde se encuentra en castillo de Embajadas y finaliza el acto, la Mahoma lo realiza sobre un carro junto a sus inseparables personajes. A su lado en la parte delantera ‘’la Madre’’, a un lado ‘’lo *versador’’ y al otro ‘’lo *consumeta’’; y detrás de Mahoma el que hace que las cuerdas de los brazos y el jefe de la efigie se muevan.  “Els versets de la Mahoma”. El versador es el encargado de declamar los versos de la Mahoma cada vez que el carro efectúa una parada.

En la puerta de la antigua casa de la familia Candela,  el carro hace una nueva parada y se le coloca a Mahoma desde la balconada ‘’los rollos’’ (pasta típica de Biar hecho a base de harina, azúcar y aguardiente), col•*locant-se los en la media luna que puerta en su turbante.

Nada tienen de especial estos rollos, si tenemos en cuenta la parte de la repostería. Son unos rollos de anís, dulces que se pueden encontrar en cualquier municipio de España. Sin embargo, en Biar a estos rollos se les denomina Rollos de la Mahoma y adquieren el nombre debido a este acto.

Así, en las grandes bandejas de pastas que no faltan en cada casa con motivo de los Moros y Cristianos de Biar siempre hay lugar para los rollos de la Mahoma